La sanidad privada ha crecido. Como es sabido, la atención prestada por el Sistema Público de Salud suele requerir mucho tiempo. Esto hace que más usuarios busquen asistencia médica en consultorios, clínicas y hospitales privados. Como la demanda sigue aumentando, surgen nuevos negocios. Con ello, la competencia es cada vez más feroz.
Para generar una ventaja competitiva sobre los competidores, satisfacer al público interno y externo y tener mejores resultados, revisa nuestros consejos de Clínica Leven a continuación:
1. Analizar la empresa
El primer paso para una gestión eficaz de las clínicas y oficinas debe ser un análisis general de la institución. Esto incluye la realización de un estudio de cada sector para conocer los puntos fuertes, las deficiencias y las medidas que deben tomarse.
El resultado es una administración integrada, que conoce las particularidades y necesidades de cada área, para que siempre tengan un buen desempeño.
2. Formar a los equipos
Atender bien a un paciente no significa sólo tener un personal clínico cualificado. Aunque esta sea la principal característica de una institución sanitaria, hay servicios como la recepción, la limpieza, la seguridad y la enfermería, que también forman parte de una buena experiencia.
Para que los clientes tengan realmente una percepción positiva, es esencial que la dirección de las clínicas y consultorios invierta en la formación y cualificación constante de los empleados. Estas deben incluir los propósitos, los valores y la conducta a seguir, además de las calificaciones técnicas que contribuyen a la optimización del servicio.
3. Realizar un control de inventario
Otro punto importante en relación con el control y el ahorro de recursos es la gestión eficiente del uso de los materiales. Una buena gestión debe contar con datos como los productos en stock, los artículos que se están agotando y necesitan ser comprados para la continuidad de los servicios y los que están en exceso.
Así, la gestión de las clínicas y consultorios tiene una noción real sobre todos los activos. De este modo, no se producen roturas de stock, que pueden perjudicar el servicio, ni despilfarros que comprometan el presupuesto.
4. Promover la humanización
El perfil de los pacientes ha cambiado radicalmente en los últimos años. Hoy, ese servicio frío y sin empatía ya no está bien visto. Al contrario. Lo que los clientes de una institución sanitaria buscan es la competencia del equipo médico combinada con la valorización, la atención y el cuidado humanizado.
Para ofrecer una experiencia de calidad a este nuevo paciente, la dirección de las clínicas y consultorios debe analizar el escenario empresarial actual y ver si el concepto se ha practicado. Si no es así, es urgente que se revisen las políticas y conductas, para no perder clientes frente a la competencia.
5. Contar con la tecnología
Para optimizar procesos como la atención, la administración y la seguridad, la dirección de clínicas y hospitales puede recurrir a la tecnología. En el mercado existen varios sistemas y programas informáticos que pueden incorporarse a las instituciones en el día a día.
Podemos mencionar la gestión informatizada de procedimientos, la inserción de historias clínicas electrónicas, la tramitación digital de cuentas, el control de acceso automatizado, los chatbots de atención y mucho más.
Si la gestión de las clínicas y consultorios cuenta con procesos bien estructurados, seguimiento integrado de las áreas, equipos capacitados y un excelente servicio, los resultados serán sin duda mucho más prometedores.